El deporte es una manera de vivir para una cantidad ingente de personas en el mundo. Es posible que no haya nada que tenga tanto poder y tanto seguimiento en todo el mundo como lo es el deporte. También es muchísima la gente a la que le gusta no solo seguirlo, si no también practicarlo. Desde luego, el deporte puede ser considerado como el fenómeno de masas más grande de todo el mundo. Argumentos hay de sobra para tratar de defender esta teoría. Y no es para menos. La realidad pone de manifiesto que el deporte goza de una importancia brutal.
Dentro del mundo del deporte, hay espacio para prácticamente todo:
• El fútbol es el deporte que más mueve en todo el mundo.
• El baloncesto tiene en Estados Unidos y Europa sus principales baluartes.
• Asia tiene en deportes individuales como el bádminton los deportes de combate sus principales baluartes.
• También existen deportes que se encuentran en plena progresión, como lo son el fútbol sala o el pádel, cuyos seguidores y practicantes siguen creciendo con el paso de los años.
En los párrafos que siguen vamos a hablar del primero de los deportes que hemos citado en esa lista, que no es otro que el fútbol. Según un artículo publicado en el diario web El Plural, el fútbol es el deporte que cuenta con más seguidores en todo el mundo, alcanzando una cifra cercana a los 4.000 millones de seguidores, un dato espectacular. Y es que más del 50% de la población mundial es fiel aficionada al fútbol. Desde luego, tan solo este dato vale para hablar de la importancia que tiene el fútbol a nivel mundial dentro de la sociedad.
A pesar de lo que acabamos de comentar y de que todos los expertos en medicina recomiendan de una manera bastante insistente hacer cualquier tipo de ejercicio, toca hacer un poco de autocrítica en lo que tiene que ver con el deporte. Y lo vamos a hacer desde dos puntos de vista: uno referente al tema de las lesiones, que son más evitables que nunca. Y otro referente a lo que tiene que ver con la inclusión de las mujeres en el mundo del deporte, algo en lo que estamos avanzando desde hace varios años pero que no termina de concretarse nunca.
El fútbol es, a día de hoy, un negocio injusto a todas luces sobre todo en lo que tiene que ver con la igualdad de géneros. La publicidad y el marketing que está relacionado con este deporte van orientados al género masculino y dejan de lado al femenino. Pero en este negocio también es bastante mejorable el hecho de que apenas existe una concienciación y una campaña clara en pos de prevenir las lesiones, el principal mal de este deporte. Los y las profesionales de una entidad como Marians Sport, dedicada a la venta de botas de fútbol entre otras cosas, han identificado este tipo de injusticias y han tratado de ponerle solución apostando por incluir a la mujer y la prevención de lesiones entre sus diferentes campañas publicitarias. Y los resultados han permitido combatir todos los estereotipos y males que están relacionados con el fútbol.
Las lesiones, el peor de los males
Son muchos los médicos y especialistas que han denunciado la falta de concienciación que hay al respecto de la prevención de lesiones en el mundo del fútbol a día de hoy. Un artículo del diario BBC informaba de cuáles son las lesiones que más se repiten a día de hoy en el mundo del fútbol. El tobillo resulta ser la zona más afectada en lo que tiene que ver con el fútbol y una buena zapatilla o bota puede ser vital, en diferentes casos, para prevenir este tipo de situaciones.
Que el fútbol sea un deporte de los más populares es una buena noticia, pero desde luego tenemos muchas cosas que mejorar en lo que tiene que ver con esta actividad. Y sobre todo en lo que tiene que ver con la prevención de todos los males que van asociados al fútbol, que por desgracia son bastantes y que hacen que este deporte, que es precioso, a veces se convierta en el inicio de una tortura sin fin para una gran cantidad de personas.
Es evidente que, desde esta web, vamos a seguir denunciando todo lo que nos parezca que es mejorable en torno al mundo del deporte. Son todavía muchas las cosas que se pueden cambiar en materia de prevención y de estereotipos. Y que se deben cambiar. Es evidente también que, de hoy para mañana, es muy difícil cambiar las cosas. Pero con un trabajo continuo y poco a poco son muchos los avances que se pueden ir produciendo no solo en este caso, si no en otros muchos más.