El tabaco sigue siendo un problema de calado en nuestra sociedad y es hora de que empecemos a eliminarlo tan pronto como nos resulte posible. Es una pena que una cosa tan dañina como lo es esta caracterice nuestra vida solamente por el hecho de que, cuando somos jóvenes, fumar nos puede ayudar a socializar y a sentirnos más mayores de lo que realmente somos. Eso tiene consecuencias y la verdad es que hace que nos compliquemos la vida más de la cuenta por una tontería como la copa de un pino. Esa situación que hemos descrito es el punto de partida para una vida que después va a permanecer enganchada al tabaco.
En España, hemos padecido grandes problemas con el tabaco a lo largo de las últimas décadas. La cantidad de fumadores ha sido muy grande en el interior de nuestras fronteras y la verdad es que eso nos ha obligado a que, desde el sector público, se ejercieran políticas que estuvieran destinadas a reducir el consumo. Una de ellas fue la ley antitabaco de principios de siglo, que fue muy criticada pero que ahora es ampliamente aceptada entre los distintos sectores sociales. Otra es el encarecimiento de un producto como este, que cada vez está disponible para menos bolsillos. No cabe la menor duda de que hablamos de un producto contra el que se ha luchado, pero que requiere de una lucha todavía más grande.
Fumar tiene una incidencia para todas las personas que cuentan con una cajetilla de cigarrillos en su bolsillo, pero es especialmente grave cuando la persona que lo hace padece cáncer. Hemos querido saber cuál es el impacto del tabaco en el cáncer y para ello hemos recurrido a la web de quienes mejor lo saben, los profesionales de la Asociación Española Contra el Cáncer. En caso de fumar, el riesgo de padecer cáncer de pulmón es 20 y 25 veces más grande que en una persona que no fume. Pero ahí no acaba la cosa, porque el tabaco está detrás del 84% de los cánceres de laringe y el 50% de los cánceres de vejiga. Y eso por no hablar del cáncer de boca, esófago, garganta, hígado, estómago, colon, recto, ovario… Un drama.
Eso sí: tenemos que decir algo bueno respecto a este tema porque parece ser que cada vez más gente se está echando para atrás en lo que respecta a esto de fumar. Así es como lo apunta una información de El Mundo que dice que España registra en 2024 el menor consumo de tabaco de los últimos 30 años. Solamente fumaba 1 de cada 4 españoles, una incidencia mucho menor que la que se registró en el año 2022 (en concreto, 8 puntos por debajo que entonces). Aunque es verdad que la noticia que el alcohol es la sustancia más consumida, nos quedamos con las buenas noticias que nos deja este texto sobre el tabaco. Es un halo de esperanza.
¿Por qué está dejando la gente de fumar? La verdad es que la mayoría va siendo consciente de los riesgos que eso entraña. Todos o casi todos hemos tenido algún familiar o conocido que ha padecido las consecuencias de esto, ya sea a través de un cáncer de pulmón, una tos persistente que impida hacer vida normal o incluso el hecho de que los dedos de las manos les hayan cogido un matiz naranja que no solo es feo, sino que parece propio de una persona enferma. Es una verdadera lástima que haya personas que tengan que pasar por esto y que vayan degradando su figura de manera progresiva.
La verdad es que se están elaborando planes para intentar que la gente deje de fumar y reduzca de este modo su dependencia del tabaco. Ya hemos dicho que el sector público está haciendo lo suyo al respecto incluyendo más impuestos relativos al consumo de esto. También se están llevando a cabo estrategias de marketing orientadas a esto, a seguir informando a la gente de lo que realmente está haciendo cuando enciende el mechero y prende uno de los cigarrillos que guarda dentro de la cajetilla en el bolsillo. Pero el esfuerzo tiene que ser colectivo y no solo debe estar relacionado con las instituciones públicas. Afortunadamente, eso no es así.
Por suerte, hay muchas entidades que están arrimando el hombro en lo que tiene que ver con la eliminación de hábitos como el tabaquismo. Las que más lo están haciendo son las farmacias. En la farmacia El Ancla de Huelva, que ha sido acreditada por la Red Andaluza de Servicios Sanitarios y Espacios libres de humos con el nivel Bronce por su colaboración en la deshabituación tabáquica, nos han contado que en lo que va de 2025 se ha disparado el número de personas que les pregunta cómo pueden dejar de fumar y qué deben hacer para ello. Lo que nos dicen también es que la mayoría de esas personas parecen verdaderamente concienciadas porque han comprendido, con angustia, los males que conlleva fumar.
Relación de efectos negativos que vais a padecer si seguís fumando
Fumar tiene una barbaridad de cosas negativas, pero muchas veces no solemos hablar de ellas porque sabemos que este es un tema que nos podría incomodar. Vamos a hacer una relación de cuáles son y lo que pueden provocar tanto de manera directa como indirecta.
- El cáncer de pulmón y los diferentes tipos de cáncer de los que os he hablado son solamente la punta del iceberg.
- La tos persistente también es otra de las cosas que más incomodidades nos va a generar. En ocasiones, no nos va a dejar ni siquiera dormir. ¿Podríais aguantar eso?
- El olor es otro de los asuntos que peor llevamos. Las personas que fuman están rodeadas por el olor del tabaco y ese es un olor que, por desgracia, también se pega a la ropa y genera que, incluso aunque no hayamos fumado en las últimas horas, las personas que nos rodean tengan que sufrir ese olor.
- El color de las paredes interiores de nuestra vivienda también se va a ver perjudicado a causa del humo. Y también va a ocurrir lo mismo en el caso del color de las cortinas, de las sillas, de los sofás…
- También podemos hablar aquí del precio que cuesta ser fumador y de la cantidad de dinero que no podemos ahorrar o que no podemos invertir en nuestro bienestar a causa de ello.
Como podéis ver, lo que más os va a ayudar a disponer del bienestar que merecéis es no fumar. Es una cosa que cada vez más gente tiene clara y que se va a seguir extendiendo con el paso de los años. Y es que los efectos negativos que van asociados al hecho de fumar no solamente se centran en la salud, sino que trascienden a ella. Es verdad que ninguno va a ser tan peligroso como el que tiene consecuencias negativas para el bienestar de la persona fumadora y de las que le rodean, pero también es incómodo tener que pasar por algunas de las cosas que os hemos mencionado y que muchas veces no tienen que ver con nuestro propio cuerpo, sino con los espacios que nos rodean o las prendas que portamos.
¿Es posible que la sociedad del futuro sea una sociedad sin humo de tabaco? Hay muchas personas a las que les cuesta imaginárselo, pero no cabe la menor duda de que también nos costaba imaginarnos una sociedad en la que no hubiera tabaco dentro de los bares hace dos décadas, antes de que saliera la ley antitabaco que fue tan polémica en su día pero que se ha convertido en algo que defiende la mayoría de la sociedad en los tiempos que corren. Por tanto, sí, es posible conseguir que exista esa sociedad sin humo de tabaco, pero la realidad es que tendremos que caminar un poquito más para conseguirla.
El tabaco, al menos por ahora, continúa siendo parte de nuestras vidas, ya sea de manera directa o indirecta. O consumimos tabaco o en algún momento vamos a estar cerca de una persona que esté fumando. Y la verdad es que cualquiera de las dos cosas tienen su complicación y sus riesgos. Se debe hacer todo lo posible para intentar evitar una situación como de la que estamos hablando porque el tabaco es malo en todas sus formas y la verdad es que su influencia negativa se puede manifestar en cualquiera de ellas.
Si todavía fumáis, es un buen momento para que empecéis a pensar en dejarlo. Os hemos dado una nómina de argumentos para que os lo planteéis y tenéis que utilizarlos. Por vuestro bien y por el de todas aquellas personas que os rodean y que os quieren. A partir de ahora, vosotros y vosotras tenéis la decisión. Es una decisión importante y que va a marcar vuestra vida. En caso de que no seáis fumadores, os animamos a que no entréis en ese juego. Os arrepentiríais tarde o temprano.