Estamos en un momento en el que todas las contribuciones que se realizan en materia de cuidado del medioambiente son importantes. Siempre lo han sido, de eso no podemos tener ninguna duda, pero viendo la situación en la que se encuentra nuestro planeta en la actualidad, cada acción solidaria con el planeta es un soplo de aire fresco para la vida del mismo. Hay que hacer todo lo posible por realizar esas contribuciones porque con ellas estamos haciendo posible que exista un hilo de esperanza para que la Tierra, nuestra Tierra, no se vea abocada a la desaparición. Estamos en un momento crítico en este sentido, así que cuanto antes empecemos, mejor.
Hay muchas maneras de hacer posible que el estado de salud de la Tierra mejore. Llevamos ejecutando algunas de ellas desde hace bastante tiempo, como la reducción de la dependencia de los combustibles fósiles, como el diésel o la gasolina. Además, también estamos haciendo todo lo posible por asegurar mejoras en materia de energías renovables, algo en lo que España es bastante fiable y emprendedora. Por otro lado, la reducción de plásticos o la producción de vehículos híbridos o eléctricos es otro de los asuntos que se están implementando y cuyos efectos ya se están notando a lo largo y ancho de todo el mundo.
Hay otro asunto que tiene mucho que ver con la mejora del estado de salud de la Tierra y en la que estamos acometiendo bastantes mejoras. Tiene que ver con la alimentación, que además es un aspecto básico para la garantía de nuestra salud. Y es que cada vez consumimos más productos ecológicos o que están elaborados con algún tipo de materia prima ecológica. Este es uno de los avances más prometedores de todos cuantos tenemos entre manos y la verdad es que se debe hacer hincapié en él. Todo lo que nos va a proporcionar va a girar en torno a una mejora sustancial de la calidad de vida de la gente… y de la casa de todos y todas.
Una de las categorías de productos que más viene trabajando en lo que respecta a la ecología es el de la repostería. Cada vez son más los productos de esta materia que se elaboran de una manera ecológica y con materias primas que evitan cualquier tratamiento o procesamiento que no sea ecológico. Ni que decir tiene que eso evita no solo que se siga degradando el entorno, sino que también se apueste por algo tan necesario como lo que hemos comentado más arriba: la salud y el bienestar de la gente. La verdad es que es un avance del que se debe tomar nota en diferentes aspectos de la producción alimentaria tanto española como de otros países.
Que la sociedad en general esté apostando por una alimentación más sana es lo que está haciendo posible que estemos consiguiendo avances en materia medioambiental. Y varios de los productos que han tomado la delantera en este sentido son los bizcochos y las galletas, tal y como nos han hecho saber desde Rincón del Segura, un negocio especializado precisamente en este tipo de alimentos y que ha visto incrementada su producción y facturación en los últimos años. Esa es la mejor prueba de que está creciendo la conciencia en materia medioambiental en España… y que está ocurriendo lo mismo en lo que tiene que ver con la alimentación.
El cuidado del planeta y el de nuestro propio cuerpo, como veis, están más ligados que nunca. Si entendemos esto, está claro que tenemos mucho terreno ganado. Y esperamos que así siga siendo. Debemos reforzar todo lo que tenga que ver con ambas cuestiones y lo podemos hacer consumiendo productos que sean ecológicos y que hayan sido elaborados de una manera respetuosa con el entorno, porque eso es lo que va a hacer posible que también estemos cuidando de nosotros mismos. Esto tiene un valor incalculable y que debemos extender a todas las personas que sean de nuestra confianza. Es el mejor modo de continuar superando fases y mejorando nuestro bienestar y el de las personas que nos rodean.
La pastelería y bollería, una tradición que se ajusta a las nuevas tendencias
Hay muchos lugares en España en los cuales se elaboran productos de pastelería y bollería de primera calidad, de una manera artesanal y que sirven no solo para colocar en el mapa los pueblos o ciudades en los que se elaboran, sino para que también esos lugares reciban una interesante afluencia de turistas. A todos y todas nos gusta algún producto que sea de la familia de la pastelería o la bollería, así que seguro que estáis al tanto de los sitios exactos en los que se elaboran. No es para menos. Sin duda, la presencia de productos como estos agradan incluso a los más reacios a comerlos.
Buena prueba de lo que estamos comentando se extrae de las dos noticias de las que os vamos a hablar a continuación y que procedemos a explicar:
- La primera de ellas procede de la página web Qcom y nos viene a decir que el 60% de los españoles hace repostería al menos una vez al mes. No cabe la menor duda de que se trata de una cifra bastante interesante y que deja claro ya no solo que nos guste este tipo de alimentos, sino que también nos llama la atención el proceso por el cual se elaboran. Y eso es lo que, día a día, va extendiendo una tradición como la que estamos comentando y la conciencia que existe en torno a la ayuda medioambiental que está directamente ligada a la elaboración de estos alimentos de manera artesanal.
- La segunda de las noticias realmente es un estudio del portal web Statista en relación al volumen de productos de bollería, pastelería y cereales consumidos en España durante el año 2022. Los pasteles y demás productos de bollería son los más consumidos dentro de esa familia, con un montante total de 253 toneladas, seguido de cerca por las galletas, con 227 toneladas. Los cereales, que se sitúan cerca de las 73, y los productos de Navidad, que pasan de las 31, completan la lista. En resumidas cuentas, los productos que están clasificados dentro de alguna de estas 4 familias son un auténtico éxito en el interior de nuestras fronteras.
Ya habéis podido ver que estamos hablando de productos muy tradicionales y bastante característicos de nuestra tierra. Y la verdad es que es de valorar el hecho de que se trata de productos que se están adaptando a las nuevas tendencias que se vienen produciendo en la sociedad. Ese respeto por el medioambiente y por el cuidado de cada proceso es algo que lo demuestra y que está claro que genera un impacto de lo más positivo en las vidas de la gente. Por tanto, lo que resulta de mayor interés en este sentido es que se mantengan todos esos procesos y que se sigan adaptando a la realidad en la que nos estamos moviendo. Solo de esa manera se puede alcanzar el progreso que tanto demandamos y que, a fin de cuentas, es el que necesita el planeta en el que vivimos.
Lo que hemos comentado en el párrafo anterior también le da una mayor popularidad a los productos de los que estamos hablando. Como es lógico, todo lo que tenga un impacto positivo a nivel social es siempre muy bien recibido. Pero es que, si encima de eso, hablamos de productos deliciosos y que gustan a un porcentaje muy grande de una población, entonces se produce un arraigo y un cariño sobre esos productos que es muy difícil que decaiga, incluso aunque pasen muchos años. Esto es lo que ha ocurrido, ocurre y seguirá ocurriendo con la bollería ecológica tanto en España como en otros países (de nuestro entorno o más lejanos).
La próxima vez que compréis productos como estos, seguro que recordáis muchas de las cosas de las que venimos hablando a lo largo de todo este artículo. Y seguro que eso sigue haciendo posible que muchas personas continúan comprando estos y otros productos que también están buenos y que también tienen una contribución positiva para el medioambiente gracias a su tratamiento, como puede ser el caso de la fruta, para la que en muchos casos ya no se usan pesticidas. El número y la variedad de los productos que forman parte de esta manera de hacer las cosas se va a ir incrementando. Todos y todas nos vamos a congratular por ello.
La Tierra necesita ayudas de todo tipo para continuar existiendo y para ser un hogar lo más seguro y confortable posible para los seres humanos y el resto de seres vivos que la habitan. Para ello, es necesario que seamos conscientes de todos los actos que realizamos y de todo lo que puede generar una contribución para su mejora. Hoy hemos hablado largo y tendido sobre este tema y toca que pongamos algunas cosas en práctica, así que, si os encantan los productos de pastelería y bollería, ya sabéis cómo actuar al respecto.